PALABRAS A MIS LECTORES

ALGÚN PAJARILLO ME HA CONTADO QUE EN ESTE IR Y VENIR POR EL UNIVERSO INFINITO ENTRAMOS Y SALIMOS (SIN DARNOS CUENTA DE ELLO) POR LOS POROS DE LAS SENSACIONES.

EN TAL CASO, PIDO QUE LA SATISFACCIÓN DE GOZAR LO QUE SENTIMOS NO NOS ABANDONE NUNCA Y NOS LLEVE A TOCAR UNA ESTRELLA: LA NUESTRA.




lunes, 26 de abril de 2021

LA HISTORIA DE "EL RITMO DEL CONJURO" , de Rosa Marina González-Quevedo



Podéis conocer algo más acerca de la historia, los personajes y la motivación que me condujo a escribir El ritmo del conjuro en mi página de Youtube:




     En Amazon KDP EL RITMO DEL CONJURO. DEJA TU RESEÑA.




jueves, 22 de abril de 2021

PARA MATAR EL TIEMPO Y LAS POLILLAS (RELATO)

 

 

 

Imagen tomada de Pixabay.com


«De todas formas, aunque no nos queda demasiado tiempo, dame la oportunidad de intentarlo. Sí. De intentarlo he dicho. Hacer el intento... Al menos eso, ¿no?»; no recuerdo si dijo algo más antes de largarse. Recuerdo, sin embargo, su silueta a través del cristal de la puerta. Parecía frágil. Y luego, nada más. Se fue y punto. ¿Qué quieres que te diga, maja?... ¿Te tomas un café?... Anda, siéntate, que no te saldrán raíces por estar ahí, como una estaca... ¡Figúrate!, yo que me paso el día de aquí para allá no soporto estar de pie por más de cinco minutos, mucho menos con estos tacones a los que me obliga la vida... ¡Jajaja!... Dime si el café está bien de temperatura... ¿Sí?... ¿Cuánto te pongo de azúcar? ¿Una cucharadita rasa?... Ah, lo tomas igual que yo. No soporto el café muy dulce. Y ya casi tampoco soporto la música demasiado alta...como la de la vecina... que alardea de estar pletórica de alegría.

Y bien, como te estaba diciendo, se fue sin más ni más. Pero lo conozco. Volverá. Conozco a ese hijo de la gran zorra, malagradecido... Y yo, la zorra que lo parió. «¡Déjame ser feliz, mamá!», eso me dijo. Y ¡dime tú qué quería! Pues, nada más y nada menos que irse de mi habitación a dormir solo. Dijo que ya era adulto y que deseaba dormir solo. SOLO, así como suena... ¿Y yo qué? Yo, que le he dado los mejores años de mi juventud, que me he quitado de comer para que él comiese, que lo he mimado y protegido tanto... ¿Y yo qué?

Volverá. Lo sé. Me necesita. Me ama más que a nadie en este mundo y no podrá jamás vivir sin mí.

 ***

El viejo bibliotecario pasa otra página. De vez en cuando selecciona algún texto al azar para matar el tiempo y las polillas; sobre todo, el tiempo, que no pasa entre tantos y tantos libracos olvidados. Se niega a servirse de las ventajas que la era digital le ofrece; por ejemplo, prefiere aún los catálogos físicos de tarjetas a aquellos de la red. Lo cierto es que esta biblioteca le está resultando ya una carga difícil de llevar a cuestas. Su espalda se encorva. Sus piernas se hacen cada vez más débiles. Por ello, al azar, selecciona textos para una lectura muy somera... a ver qué libro tirar y cuál dejar allí, empotrado para siempre en su pecho.

Tenía treinta años cuando abandonó el hogar materno. Hasta aquel entonces, dormía en la cama de su madre. A su lado. Y ella le acariciaba el cabello y le exigía rezar un Ave María antes de apagar la luz. Y él, que lo único que le pedía era una habitación donde poder hacerse hombre..., sin el osito de peluche que ella le obligaba a mantener entre sus brazos..., sin la Santa Biblia..., sin patéticas rememoraciones como aquella del primer diente de leche...

¡Pero la vida es tan breve! Pasan los años y no nos damos cuenta. Y él, continuaba leyendo demasiados libros; los catalogaba y acomodaba ordenadamente en tristes estantes. Con tomos, folios y todo lo demás.

 Muchos libros, si bien siempre la misma historia.

 Siempre la misma.

 Siempre.

 

martes, 13 de abril de 2021

PRESENTACIÓN DE "EL RITMO DEL CONJURO" EN LEÓN. RESEÑA DE MARTA MUÑIZ RUEDA

Marta Muñiz Rueda

 

Hay libros que son camino, otros son estampa. Algunos existen como envoltorios de aventuras y hay libros que son búsqueda, como “El ritmo del conjuro”. La búsqueda del origen, la búsqueda del yo, la búsqueda apasionada del amor y la vida. La indagación espiral hasta el reconocimiento del ser primigenio, la anagnórisis del héroe, que siempre puedo ser ‘yo misma’.

Rosa Marina González-Quevedo escribe en estos versos un viaje iniciático, colectivo y vertiginoso, que nos conduce a la raíz misma de la poesía. Todo el libro es un único poema dividido en episodios narrativos que bien podrían ser ramas de un mismo árbol u hojas de una sola rama. La poesía nace a través de la magia, viaja revoloteando por la historia, visita night-clubs y bebe lingotazos de jazz, se derrama en Epidauro como un elixir, se escapa de un lienzo de Dalí y huye de su anterior estado, congelada en una escena de cine mudo, hasta desnudarse con irreverente frenesí. Danza a través de la música, su eterna compañera, llora en Roma al pie de una colina, bebe de las aguas ancestrales a su paso por Asia, se baña en el Caribe y muere en África para renacer. La belleza es capaz de atravesar los límites del espacio-tiempo infiltrada en el sonido de una flauta, inoculada en el humo del cigarro de un chamán, depositada en el cuenco original en el que surgió la vida.

Nada puede detenerla. Es amor y sensualidad y es más fuerte que nosotros mismos.

‘El ritmo del conjuro’ es un libro denso, complejo, lleno de ramificaciones por las que perderse para volver al eje central. Transitar por sus páginas es un viaje divino e infernal. Como Dante, baja a los infiernos para atisbar el cielo. Y ante la magnitud de su significado, no cabe sino preparar el alma para recibir una fuerte sacudida. Hay que purificarse hasta alcanzar el conocimiento. Fundirse con la naturaleza para abrir nuestra mente a la pureza. Nada más debería preocuparnos.

Son muchas las interpretaciones y enseñanzas que podemos absorber entre sus líneas, como si nos adentrásemos en la cueva de la sabiduría original, pero ya mis compañeras podrán realizar un análisis literario y filosófico mucho más rico del que la Marta poeta les ofrecería.

Como Marta pianista, mi misión es centrarme en uno de sus elementos base, uno de los pilares del libro: la música. Y no es cuestión baladí, créanme. La música impregna todas y cada una de sus páginas, desde el sugerente título hasta el esclarecedor susurro final.

Ritmo. Ritmo de conjuro. Regresa el chamán en múltiples formas, pero el arte tiene forma de mujer, aunque invite al hombre a fundirse en sus entrañas.

Rosa Marina nació en una isla en la que el ritmo vive en el aire que se respira. Cuba es son, y es además fusión y confusión de influencias universales. Por eso, como buena cubana, sus palabras han absorbido la métrica latina y aun sin ser del todo consciente, o tal vez sí, Rosa combina Troqueos, Yambos, Dáctilos, Anapestos, Espondeos, Anfíbracos, Tríbacos…: “Cuervo/ vuela libre/ misterioso/ oculto en la niebla/ grazna…” y hace que esos metros clásicos se mezclen con el bagaje de origen africano que fecundó Cuba y vive en la voz del chamán y en la guajira: “¡Cumbanchá/ Túmbara/ Bemberé!”. También el jazz aparece como si se asomase a través de la cortina de un antro neoyorquino: “Nadie supo y nadie sabe por qué bajó la frente/ al amanecer/ en la soledad de su última luna” (¿No son estos tres versos puro soul?) “Comienza la estación oscura” como quien se abandona al poder divino de la improvisación. Y es capaz de retroceder a esencias bíblicas, a ritmos propios de la civilización caldea y mesopotámica, casi salmódica: “Cuentan que, en lo alto de un roble, / dominando el bosque, desde su calabaza/ Osaín Agé dio a beber a Ambrosía las letras de Ifá”. No podemos obviar las reminiscencias medievales al modo de epíteto épico: “Hembra de una sola chancla que baila en un pie”, pero tampoco Rosa es ajena al bolero: “Ponme un trago que muero de sed”.

El viaje musical que atraviesa “El ritmo del conjuro” es puro vértigo, es subirse a un carrusel en el que todo es posible, pero que siempre sorprende para bien, ya sea al ritmo de seguidillas o coplas andaluzas (¡Cómo iba a faltar España!): “Alumbra al Norte/ la luna llena/ canta cantino/ la castañuela.” Y desvaneciéndonos en su pentagrama vanguardista aterrizamos ante el embrujo evocador de Camille Saint-Säens y su Danza Macabra, con paso a dos para principiantes: “Muerte guarda el violín y se esconde/ para vernos cruzar -de nuevo- el puente donde a veces vivo/ y otras veces muero.”

Morir es renacer al son de un shitar, agonizar de Egipto a Oriente con la levedad de un haiku: “de Sadako/ en pliegues de Origami/ se dibuja la vida”. El chamán nos conduce al origen, que bien puede habitar en el vientre de África: “¡Tumbará! ¡Bemberé!” o en la céltica melodía de una gaita escocesa o irlandesa: “gime/ más allá del mar/ del Sol/ de los astros…” Decrescendo, sotto voce, los tambores se van apagando, el deseo ya tomó el poema: “Late el corazón. Brota su mano/ por el cuerpo ardiente…” (Otra vez España y su voz de fuego). Suena el güiro, llévame a Cuba, que es primavera: “Cúmbara-cúmbara suena/ su cintura. Que no baila. / Porque vuela.”

Del caos, la luz. Del ruido, la certeza: “Cae la noche. / Tu abrazo me envuelve. / … Amanece.” No dejen de leerlo, no se lo piensen mucho, “el camino es breve”.

 


Marta Muñiz Rueda

(Gijón, 1970) 

Es escritora y músico. Ha publicado libros de poesía (El otoño es nuestro, Libro de la delicadeza), la novela Tiempo de cerezas, y los libros de cuentos 13 cuentos dementes Anna y las estrellas.

Ha trabajado como corresponsal en Europa para las revistas culturales "Horizontum" (México) y "Visítame Magazine" (Nueva York) durante los años 2017 y 2018.

Desde pequeña su vida ha estado ligada al aprendizaje y la enseñanza del piano y la composición, ya que todas las mujeres de su familia han estudiado interpretación. 

Es licenciada en Filología Hispánica por la Universidad de Oviedo y titulada profesional de piano por los Conservatorios de Gijón y León. Como compositora puso música a poemas y textos de Miguel de Cervantes y Lope de Vega en la obra ‘Duelo de ingenios’, actuando a dúo con la soprano Ana Clara Vera Merino, estrenándose con gran éxito en la Biblioteca Pública de León. También es autora de cuatro obras de teatro musical infantil en la compañía de la que forma parte, ‘Moraleja de la candileja’. Ha participado en numerosos eventos artísticos, antologías, revistas culturales y es columnista de opinión del diario de información general La Nueva Crónica.

PRESENTACIÓN DE "EL RITMO DEL CONJURO" EN LEÓN. PALABRAS DE LA ESCRITORA FELICITAS REBAQUE DE LÁZARO

 


Felicitas Rebaque de Lázaro


Buenas tardes. Es un placer darle la bienvenida a la presentación del libro El ritmo del Conjuro de Rosa Marina González-Quevedo. A causa de la pandemia, se ha tenido que posponer casi un año, pero esta tarde, por fin, daremos a conocer este último y especial vástago literario de Rosa Marina. Gracias por acompañarnos en esta velada, que si duda va a ser mágica, en un  marco cultural emblemático como es el Salón de los Reyes por la gentileza y predisposición de Maria Dolores Martínez Lombó, directora de Bibliotecas Municipales.

Creo que todos los que estamos aquí conocemos a Rosa Marina González-Quevedo, pero, permitidme hacer una pequeña semblanza suya.

Cubana de nacimiento, ciudadana del mundo, por su trayectoria tiene su corazón repartido entre su Cuba natal, Nápoles y España. El amor la trajo a tierras leonesas y aquí echo raíces.

Rosa Marina,  licenciada en Filosofía, en Lengua y en Literatura Románica y Latinoamericana, ha sido profesora de Historia de la Filosofía en la Universidad de la Habana y en el Instituto Cervantes de Nápoles. Ensayista, narradora, escritora, poeta, mujer muy versátil y con un gran bagaje cultural.  Con una mente privilegiada, Rosa Marina se mueve entre la intuición y la lógica gracias a esa visión especial que tiene del mundo, del universo y de la apreciación de lo que “no se ve” que para ella es diáfano.

Desde sus primeras publicaciones en la Habana, en el año 1992 hasta la actualidad, ha recorrido un vasto camino en el que Rosa ha madurado como mujer y  como escritora, añadiendo profundidad, excelencia y riqueza a sus textos. Creo que todos tenemos en mente su última gran novela: La Enana (Ediciones Camelot, 2020), de la que soy una fan enardecida.

 Y hoy tengo el honor de presentar su última creación: El ritmo del conjuro.

 ¿De qué trata este libro con un título tan atrayente?, se preguntarán. Yo solo voy a dar unas pinceladas del mismo porque quiero que a esa  pregunta, en su intervención, responda la propia autora porque nadie mejor que ella para hacerlo. Pero os adelanto que El ritmo del conjuro, utilizando la magia de las palabras nos sumerge en el mundo ancestral de la religión Yoruba. Un bautismo mágico para los neófitos lectores de cuyas influencias es muy difícil sustraerse desde las primeras líneas hasta la finalización del libro.

Y me podríais seguir preguntando: ¿Qué es la cultura Yoruba? ¿Qué es Ifá? ¿Quién es un orisha?

Antes de responder, he de confesar mi ignorancia, y mis escasas, prácticamente nulas, nociones de esa cultura, ni de la religión que la sustenta, ni de sus dioses,  hasta que Rosa me habló de El ritmo del conjuro. La propia autora nos lo revela en el prólogo y seguro que en su intervención también nos hablará de ello.

En lo que a mí respecta ha sido toda una revelación que me provocó, tras leerlo, la necesidad de investigar sobre esa religión ancestral, los Yorubas, una etnia ubicada en el África Occidental concretamente en Nigeria y Benín, que tras la diáspora africana se expandió fuera de sus fronteras llevando  sus creencias y tradiciones al Caribe y a Brasil, principalmente. Los mitos,  la religión y los dioses, se adaptaron y mezclaron con los propios de esas culturas y con otras reminiscencias religiosas como la católica. Este sincretismo dio lugar a lo que se conoce como la santería cubana o el candomblé brasileño.

 Pero no se inquieten, en estas páginas no van a descubrir una historia de religión o de revelaciones, lo que van a encontrar en El ritmo del Conjuro es magia, por supuesto, y un viaje, que podríamos llamar iniciático, al que nos incorpora su protagonista, Osain, un potente orisha, dios o santo si trasladamos la acepción a la cultura occidental, que rige la Naturaleza.

Rosa Marina partiendo de la historia y las leyendas que rodean a este orisha, dotándole de aspecto humano, le hace abandonar su entorno natural y le embarca en un recorrido por diferentes partes del mundo para recopilar las leyendas y  ritos atávicos de culturas y religiones comunes en su esencia.

Y a la voz del mágico conjuro de Rosa Marina nuestro orisha Osain-Agé, acompañado de la mítica vampiresa Lulú, a quien da vida Louise Brook en “La caja de Pandora”, va de un lado al otro del mundo en una superposición de tiempos y de mundos, trasladándose de lo mágico y lo oculto a lo real, moviéndose desde espacios ancestrales a tiempos más contemporáneos.

 La magia es contagiosa, la música es mágica y la poesía también lo es. El ritmo de la naturaleza, de la vida, de lo oculto y de lo que pervive en la esencia del ser, se escucha en cada frase, en cada poema de este libro. Aristóteles, en su Poética, consideraba una íntima relación entre poesía, mito y ritual. Efectivamente, la poesía es como el ritual:  mimética, dramática y mágica, esa es la razón que no haya lenguaje mejor que el poético para expresar y mostrar lo ancestral y ese lado que queda oculto a los ojos de la razón.

Llama la atención cómo la autora recoge todo tipo de personajes de épocas más cercanas  y los amalgama con las creencias Yorubas. En estas páginas podremos ver conjugados a Amanda Lear, Dalí, la legendaria Joan Geraldine Bennet, el personaje literario Sadako, con la diosa celta de la muerte Morrigan, con JUNM, dios egipcio, en lugares míticos sagrados como El Monte Sacro en Roma, con Epidauro en Grecia, Egipto, o con ciudades como Hollywood y Nueva York, todo ello vehiculado por un ritmo ora febril, ora cadencioso, a voluntad de la autora. Pero del ritmo nos hablará más adelante nuestra amiga y compañera Marta Muñiz, con más profundidad y conocimientos que yo.

La poesía se nutre de lo onírico, de lo simbólico, de un mundo interior no revelado a muchos mortales por el que Rosa Marina camina con una seguridad y confianza absoluta.

El énfasis que pone Rosa Marina en el ritmo y la cadencia del lenguaje, elabora una música verbal que provoca una especie de encantamiento al lector. Ritmo y verbo para invocar el conjuro, el mismo con el que palpita el universo.

Como dice la autora en el prólogo del libro esta historia solo se mostrará a ojos de quien ve y a oídos de quien escucha.

No se la pierdan, por favor, y …. Entren en trance.

 

 

FELICITAS DREBAQUE DE LÁZARO

Escritora / Editora de Masticadores de Letras.

Nació en Tudela de Duero (Valladolid). Afincada en León, España. Estudió Magisterio y Enfermería. Compaginó su trabajo de enfermera con su pasión por la escritura. Realizó varios cursos de relato, periodismo y novela en La Escuela de Escritores de Madrid.

Es miembro de la organización cultural Bubisher, organización sin ánimo de lucro que trabaja en los campamentos de refugiados saharauis.

Participa activamente en numerosos proyectos culturales y literarios y de animación a la lectura.

Ha publicado con diferentes editoriales libros de narrativa: relato, novela y cuento, dirigidos tanto al público adulto como al infantil y juvenil.

En la actualidad compagina la escritura con la edición de Masticadores.

Sus últimas novelas publicadas han sido Violeta Mara, maravilla y la reedición de El Latido del agua, ambas por la Editorial LxL

Blog: https://wordpress.com/view/felicitasrebaqueblog.wordpress.com

Facebook: https://www.facebook.com/felicitas.rebaque / Link a mis artículos

Correo electrónico: correoelectronico@ejemplo.com

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lunes, 12 de abril de 2021

PRESENTACIÓN DE "EL RITMO DEL CONJURO" EN LEÓN

 




ELL PASADO MIÉRCOLES 7 DE ABRIL FUE PRESENTADO MI LIBRO DE POESÍAS EL RITMO DEL CONJURO (EDITORIAL FLEMING, 2021) 

EL EVENTO TUVO LUGAR EN EL SALÓN DE LOS REYES (ANTIGUO AYUNTAMIENTO) DE LA CIUDAD DE LEÓN (ESPAÑA)


DOY MI SINCERO AGRADECIMIENTO A BIBLIOTECAS MUNICIPALES, EN ESPECIAL, A SU DIRECTORA MARÍA DOLORES MARTÍNEZ LOMBÓ POR LA ORGANIZACIÓN Y REALIZACIÓN DEL EVENTO EN ESTE PERÍODO EN EL QUE, AÚN, DEBEMOS ADECUARNOS A LAS CIRCUNSTANCIAS ESTABLECIDAS POR EL COVID-19

QUIERO HACER LLEGAR, ADEMÁS, MI AGRADECIMIENTO A QUIENES ME ACOMPAÑARON EN LA PRESENTACIÓN: FELICITAS REBAQUE DE LÁZARO (ESCRITORA), MARTA MUÑIZ RUEDA (ESCRITORA Y PIANISTA), NOEMÍ MONTAÑÉS FERNÁNDEZ (ESCRITORA) Y TERESA GONZÁLEZ ÁLVAREZ (ACRTIZ)

MI ABRAZO Y GRACIAS INMENSAS A LOS FOTÓGRAFOS MARCELO O. BARRIENTOS TETTAMANTI, ALEJANDRO (NEMONIO) ALLER Y PACO FERGAR MELLA , AUTORES DE ESTAS IMÁGENES QUE QUEDARÁN COMO RECUERDO DE ESTE DÍA






martes, 6 de abril de 2021

"EL RITMO DEL CONJURO" NO SE HACE ESPERAR NI UN DÍA MÁS


 

EL LIBRO DE POESÍA-NARRATIVA TITULADO "EL RITMO DEL CONJURO" SERÁ PRESENTADO EN LEÓN (ESPAÑA) MAÑANA MIÉRCOLES 7 DE ABRIL DE 2021.

EN DICHO EVENTO, LA AUTORA, ROSA MARINA GONZÁLEZ-QUEVEDO, ESTARÁ ACOMPAÑADA POR FELICITAS REBAQUE DE LÁZARO (ESCRITORA), MARTA MUÑIZ RUEDA (ESCRITORA Y MÚSICO), NOEMÍ MONTAÑÉS FERNÁNDEZ (ESCRITORA) Y TERESA GONZÁLEZ ÁLVAREZ (ACTRIZ).

LA PRESENTACIÓN TENDRÁ LUIGAR EN EL SALÓN DE LOS REYES DE DICHA CIUDAD.


TRAS UNA LARGA Y PACIENTE ESPERA DEBIDA A LAS IRREGULARIDADES OCASIONADAS POR LA PANDEMIA DE COVID-19 QUE NOS AZOTA DESDE HACE MÁS DE UN AÑO, "EL RITMO DEL CONJURO" VERÁ LA LUZ ANTE EL PÚBLICO EXPECXTADOR POR PRIMERA VEZ.

NUESTRO AGRADECIMIENTO A BIBLIOTECAS MUNICIPALES DE LEÓN Y A TODOS AQUELLOS QUE, DESDE SIEMPRE, NOS HAN ACOMPAÑADO EN ESTA AVENTURA DE BUSCAR NUEVOS CAMINOS EN POESÍA.

QUE EL RITMO DE LA VIDA ESTÉ CON TODOS NOSOTROS.