A mis amigos y lectores.
Sentados en nuestra mesa, que es “nuestra” porque es
“la de cada día”. En este rincón donde nos tomamos las manos a través de una
red invisible... En esta plaza virtual, alcemos nuestras copas para brindar por
nosotros. Buen brindis éste:
Que las dificultades cotidianas no sean barrera para
alcanzar nuestras metas.
Que la memoria sea la mejor aleada y no una enemiga
traidora, almacén de recuerdos estériles.
Que la inteligencia nos abra el camino hacia la serenidad
y la paz.
Que el tiempo, al pasar, nos lleve a escalar los
surcos del arco-iris de la sabiduría y el progreso.
Que seamos felices a pesar de nuestros errores y
carencias.
Que seamos siempre capaces de transmitir amor.
A mis amigos y lectores, desde esta página de LOS
DÍAS DE VENUS EN LA TIERRA, os deseo un 2015 pleno de espíritu de
renovación y de logros personales.
Astarté.